La zona afectada. -Foto del Colectivo Ecologista de Avilés.- |
Fuente: Nota de prensa e imagen del Colectivo Ecologista de Avilés.
El Colectivo Ecologista de Avilés vuelve a denunciar que una año después continua la laguna de aguas fecales que se creó entre las calles Santa Apolonia y José Maribona de Avilés, sin que el Ayuntamiento de Avilés actué para que desaparezca esta grave contaminación, donde sigue habiendo agua y los lodos contaminados de tanto tiempo de vertido.
Esta laguna formada por los retornos de un colector de aguas residuales de la calle Santa Apolonia fue denunciado por los vecinos al Ayuntamiento, que subcontrato a Aguas de Avilés su reparación; aunque esta no ha cumplido completamente con su obligación, con el consentimiento del Ayuntamiento. Ya que Aguas de Avilés reparó la tubería dañada; pero ni vació las aguas residuales, ni retiro ni tapo los lodos contaminados.
Esto es una muestra de la falta de interés en un tema ambiental sangrante como son los vertidos de aguas residuales, que acaban en una finca abandonada formando dos lagunas de aguas contaminadas estancadas con el consiguiente impacto ambiental y sanitario para los colindantes.
Las aguas fecales se están infiltrando en el terreno con la consiguiente contaminación del subsuelo que ya se aprecia en los bajos de las viviendas cercanas del Martinete y de José Maribona, también es un fuente de olor que detectan hasta los vecinos cercanos y un problema sanitario en estos meses próximos esperemos que de calor como no se retiren o tapen los lodos generan la aparición de insectos asociados a esta laguna estancada de aguas fecales.
Hay que recordar que el Ayuntamiento de Avilés tiene subcontratado a la empresa privada Aguas de Avilés el abastecimiento y saneamiento de las aguas, pero eso no le impide ser responsable subsidiario de que no se produzcan estos accidentes con la contaminación que suponen para los colindantes que sufren los vecinos y sus bienes.
Las aguas negras sin tratar llevan una peligrosa carga de bacterias infecciosas, virus, parásitos y sustancias químicas tóxicas, suponen un riesgo para la salud. En áreas abiertas donde las aguas negras están presentes, el olor desagradable es probablemente el peor efecto, suponiendo que no hay exposición a largo plazo. Sin embargo, las partículas de las aguas residuales son capaces de dispersarse en el aire, y la inhalación de estas provoca efectos adversos para la salud, tales como malestar gastrointestinal, diarrea, náuseas y vómitos para quienes las respiran.
Es necesario que se soluciones este grave problema, porque con el calor aumentar el olor y las molestias para los colindantes.
Colectivo Ecologista de Avilés
No hay comentarios:
Publicar un comentario