El portavoz de Agroganadería de FORO en la Junta General del Principado, Juan Ramón Campo, ha señalado que el estudio de la Facultad de Veterinaria de León sobre las causas de la muerte del osezno de la osa Tola es concluyente y apunta a la avanzada edad de Tola como uno de los posibles detonadores del desafortunado final por lo que “si la edad de la osa fue determinante para malograr el esbardo, no debería haberse sometido al apareamiento”. “La necropsia del esbardo de Tola confirma la negligencia de los irresponsables de la fundación”, afirma el diputado, que considera que debería “haberse separado de un macho que lo único que puede propinarle son mayores problemas de salud de los que ya acarrea”.
Para Campo lo relevante es el hecho de que desde diversos colectivos y expertos se asegure que “con una diligencia mínima y unos análisis adecuados podría conocerse el embarazo de la osa, y, de este modo, aunque no pudiese haberse evitado el resultado final, que sería lo deseable, al menos se justificaría la diligencia debida de los cuidadores y técnicos responsables del proyecto, que ha brillado por su ausencia”.
El diputado urge a la consejera a “operar con contundencia la enfermedad de la Fundación, en la que se sufragan salarios que de una u otra forma se demuestran inútiles, pues si el proceso de embarazo y procreación de los plantígrados, no resulta verificable, es absurdo abonar salarios de personal para el control de dicho proceso, si es que el mismo resulta incontrolable”.
Así las cosas, Campo manifiesta que los ciudadanos merecen “una explicación más digna de la ofrecida por la Consejería ante el cúmulo de despropósitos que se suceden una y otra vez entorno al caso de la osa Tola, que además de ser un atentado ecológico, supone una lesión para las arcas públicas asturianas”.
Fuente: Nota de prensa de Foro Asturias
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