Por vigésimo octavo año consecutivo, la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies hizo la entrega simbólica de la Bullada de Purpurina, “galardón” que reconoce la labor y acciones de empresas, instituciones y/o administraciones que más se han destacado en su labor contra la conservación de la naturaleza y el medio ambiente asturiano.
Este año, tras un exhaustivo análisis, debate y deliberación entre todas las candidaturas propuestas con abundantes y suficientes méritos para triunfar:
Director de Medio Natural del Principado de Asturias
Consejero de Industria, Principado de Asturias
Empresarios del sector de los áridos
ArcelorMittal Asturias
ENCE, fábrica de Navia
Ecoembalajes España, SA - Ecoembes
la Coordinadora Ecoloxista ha elegido otorgarlo: A Ecoembes, por su estrategia de lobby junto a los grandes productores y distribuidores de plástico y otros envases, como responsable de imponer los productos de usar y tirar a los consumidores.
El actual sistema de recogida de envases que se lleva a cabo en España a través de Ecoembes, no solo es ineficiente sino que pone en peligro el medioambiente.
El Sistema Integrado de Gestión (SIG) prácticamente otorga la exclusividad a la empresa de gestión de residuos de la industria embotelladora y gran consumo. Boicotean los distintos intentos fallidos de volver a instaurar el uso de envases retornables para que los productores de los residuos se hagan cargo real de su reciclaje completo.
El modelo del contenedor amarillo es poco eficiente, como ha demostrado durante los 20 años que lleva implantado en España porque mezcla cosas que se podrían reciclar fácilmente con otras que no se pueden recuperar ni reciclar con los procesos actuales de recogida, clasificación y tratamiento de residuos de envases.
Las embotelladoras y envasadoras pagan un mínimo por envase a Ecoembes y se desentienden por completo de la gestión de sus desechos. El SIG, desde su condición de monopolio, “impone las condiciones a los ayuntamientos que lo que reciben por la gestión de residuos, desde luego, no cubre los costes que representa para estos la recogida de esos envases”.
Destacada también es su falta de transparencia y rigor en cuanto al manejo de datos sobre los residuos recuperados y reciclados en España, boicoteando además alternativas reales como el Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) que incentiva la devolución ciudadana de envases para su reutilización mediante la remuneración económica, como se hacía hace décadas con las botellas de vidrio, y que ya se aplica en numerosos países con muy buenos resultados.
Por todo ello se hace justo acreedor del premio BULLADA PURPURINA 2020, que, entregado en un día como hoy, no es considerado ninguna broma.
Fuente: Comunicado de la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies
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