Los vecinos del barrio de Pumarín, en Gijón, inician una campaña de recogida de firmas contra el anunciado cambio de las numeraciones de las calles de su barrio. La petición va dirigida al Ayuntamiento de Gijón y a la Asociación de Vecinos Severo Ochoa: Paralicen el cambio de la numeración de las calles de Pumarín.
Se puede apoyar la petición en: Campaña de firmas.
Nota de los vecinos:
El barrio de Pumarín, en Gijón, se despertó con la noticia de que el Ayuntamiento le va a cambiar la numeración a sus calles. Como si la gente no tuviera ya bastantes problemas, vienen a crearles otro. La excusa, dicen, es que en la zona de las Mil Quinientas es difícil localizar los edificios porque están numerados de forma desordenada y que la Asociación de Vecinos lo ha solicitado. Sin embargo, nadie nos ha preguntado a las personas que vivimos en esa zona e incluyen en el plan un montón de calles que están perfectamente numeradas, ya que los portales siguen un orden, con los pares en una acera y los impares en la otra. Los carteros hacen perfectamente su trabajo y nadie se pierde en las calles Álava, Ana María, Andalucía, El Bierzo, Extremadura, Guipúzcuoa, Roncal y otras. Si en otro tiempo debió hacerse de otra manera, es algo que nos importa bien poco hoy en día. Y si en alguna zona hay problemas, se puede resolver con placas indicativas en las esquinas que aclaren la situación de los inmuebles, lo que evitaría tratar de resolver un supuesto problema creando otros mil. En la prensa del 21-10-2013 pudo leerse: «los vecinos tienen seis meses para modificar sus direcciones postales una vez se cambien las numeraciones de los portales. Si no lo hacen, los trabajadores de Correos dejarán de repartir en Pumarín ya que las direcciones son incorrectas y no tienen por qué conocer las que antes se utilizaban». O sea, que tienes que ser adivino y saber qué cartas te van a llegar en el futuro para avisar a los remitentes de cuál es tu nueva dirección. Hay vecin@s de Pumarín que queremos seguir con los números de siempre. NO AL CAMBIO DE NUMERACIÓN DE LOS PORTALES. Queremos una consulta popular.
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