La Coordinadora Ecoloxista d’Asturies ha vuelto a reclamar a Consejería de Fomento Ordenación del Territorio y Medio Ambiente del Principado información sobre el control que se esta realizando sobre la gestión Los neumáticos fuera de uso (NFU) en Asturias, ante las dudas que tenemos sobre su gestión una vez enviados a gestores autorizados.
En Asturias en el Plan de Residuos 2001/2010 publicado en el BOPA del pasado 7-7-2001 se estiman la producción de 6.000 toneladas al año de NFU, cantidad que en los últimos años ha disminuido de forma significativa. A pesar de esta disminución de los NFU tenemos conocimiento que una de las gestora autorizadas de los NFU de Asturias, está vendiendo neumáticos triturados para usarlos como combustible en cementeras de Asturias y en otras regiones, lo que a nuestro juicio vulnera el marco legal.
Hay que recordar que los NFU son un residuo catalogado por la UE como residuo tóxico y peligroso (Lista Europea de Residuos. Código: 16.01.03), y su gestión está regulada, de forma general en la Ley 10/1998 Básica de Residuos, y en particular en el Plan Nacional de Neumáticos Fuera de Uso 2001-2006, aprobado en octubre de 2001 (BOE núm. 260 de 30 de octubre de 2001) en Consejo de Ministros y Real Decreto 1619/2005, de 30 de diciembre (BOE núm. 2 de 3 de marzo de 2006) sobre gestión de NFU para regular las obligaciones de los agentes económicos que intervienen en todas sus fases y las condiciones generales de gestión de estos residuos.
Recientemente, dentro del Plan Nacional Integrado de Residuos (PNIR) 2007-2015, se redacta el II Plan Nacional de Neumáticos Fuera de Uso (2007-2015 II PNFU) como revisión del Plan Nacional en vigor.
En la factoría de Aboño en el concejo de Carreño, la empresa tiene autorizado un límite máximo de 2.000 toneladas/año de NFU producidos en Asturias de acuerdo a la Resolución de 23 de abril de 2008, de la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural, por la que se otorga autorización ambiental integrada a instalación industrial publicada en el Bopa del 12-6-2008.
A la vista de este uso mayoritario de los NFU asturianos, como combustible en las cementeras. Esto supone una vulneración del objetivo global de valorización energética de NFU marcado en un 25% para 2012 en el Plan Nacional Residuos, porcentaje que, cuanto menos, deberían respetar el Principado, lo que parece que no hace en vista de las cifras que maneja uno solo de los gestores autorizados.
Hay que recordar que la incineración de neumáticos de cementeras es una fuente importantísima de contaminación, por la composición de estos neumáticos. Esta contaminación se suma a la que ya genera en si las cementeras en su entorno, como se puede comprobar en Asturias.
La quema de los neumáticos (que son caucho vulcanizado+aditivos) generará unas emisiones significativas (desde la perspectiva de salud y medioambiental) de PAH (hidrocarburos aromáticos policíclicos) y de Benceno con demostrados efectos cancerígenos ambos, y probables alteradores endocrinos. Son elementos muy volátiles por lo que escapan con facilidad a las técnicas de filtrado de gases. Dado que pueden ocasionar perdida de salud también a bajas dosis, así como su presencia ubicua en alimentos y suelos, representan un serio problema de salud pública.
Un segundo grupo de contaminantes emitidos por la quema de neumáticos se centra en las micropartículas y los óxidos de plomo y de zinc. Si bien estos metales son elementos poco volátiles, con la presencia de cloro en el horno se pueden generar cloruros de plomo y de zinc, sustancias estas más volátiles y por tanto con una presencia significativa en las emisiones. Además para el caso del plomo se acepta como demostrada su acción como disruptor endocrino, por lo que dada su extrema ubicuidad en el medio, habríamos de partir de que no existen límites seguros.
Es necesario dejar que quemar residuos peligrosos en una región con unos elevados niveles de contaminación y con un grave problema de salud por la contaminación.
Fuente: Coordinadora Ecoloxista d’Asturies
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