ANADEL nos escribe para contarnos el final feliz de una historia digna de una serie de televisión. Gracias al trabajo y las denuncias de ANADEL se ha conseguido rescatar a un perro que llevaba sufriendo tremendas palizas desde hace varios meses por parte de su dueño, además de otros malos tratos, falta de alimento y agua.
Todo empezó cuando los miembros de ANADEL recibieron el aviso de varios vecinos de la localidad de El Berrón, en el concejo de Siero, alertando de la situación. Tras constatar la veracidad de los hechos se pusieron manos a la obra para intentar sacar el animal del piso, lo cual resultó muy difícil ya que el propietario del animal se trataba de una persona con antecedentes policiales. Desde ANADEL, se interpuso denuncias ante la Policía Local, el SEPRONA, la Policía Nacional y en el Juzgado. La única forma de rescatar al animal era entrando en la vivienda, pero para ello era preciso una orden judicial. Conseguir dicha orden para rescatar a un perro todavía es muy complicado. En un principio desde el juzgado se negaron a ello; pero al final un juez firmo la orden y exigió al SEPRONA que la acometiese.
Hasta el lugar de los hechos se desplazaron sendos efectivos del SEPRONA, del cuerpo de Bomberos, de la Policía Local, así como representantes de ANADEL. Tras la negativa por parte del propietario a dejar entrar en la vivienda, los bomberos tuvieron que descolgarse por la terraza del vecino para poder acceder al piso. Una vez en el interior de la vivienda se encontraron al animal encerrado en un armario, en unas condiciones higiénico-sanitarias deplorables y al dueño encerrado en otro armario.
Ahora mismo el perro es titularidad de ANADEL y se encuentra ingresado en una clínica veterinaria. En cuanto se recupere de la falta de cuidados que sufría pasará a una casa de acogida hasta que encontremos un adoptante. A pesar de que ANADEL nunca gestiona adopciones ni recoge animales, consideramos que éste era un caso de máxima urgencia, por lo que decidimos emprender las acciones necesarias para sacar al pobre animal de ese infierno.
Tenien que haberlo dejado dentro del armario al dueño
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